Parece mentira observar como crecen las plantas sin ningún tipo de ayuda, de alguna manera se defienden de insectos indeseados, están algo bajas de estatura que se deberá por las fechas en las que "surgieron", el porte es muy sano, comienzan a tener flores y una de ellas tiene dos pequeños tomates. Para evitar que las pisen, les he puesto una tira de algodón de color azul, bien visible como observareis, aunque con ciertas dudas, de alguna manera les he fastidiado el "camuflaje" y ahora llaman la atención, no estoy muy convencido de la decisión tomada, siempre estaré a tiempo de quitarles el nudo.
Al tomate mas grande le empieza a abrazar una enredadera, estaré "al tanto" para intervenir por si empieza a perjudicarla de alguna manera, solo en caso extremo.
A vueltas con las acelgas, una vez mas voy a comentar sobre ellas, parecen indestructibles, en primavera cuando limpie las tierras de pequeñas piedras y raíces, tire los restos en un rincón, junto a una vieja pared, de alguna manera estas raíces arraigaron, y de que manera, las plantas están bastante mas hermosas que cuando estaban en las macetas. Pronto prepararé un rico plato con ellas.
Están rodeadas de todo tipo de hierbas, nadie las cuida, las babosas y los caracoles se ceban con ellas y descansan entre sus hojas, el riego es natural, es decir, solo cuando llueve, la ubicación no es favorable y a pesar de todos los inconvenientes están fantásticas.
Realmente es necesario que nos tomemos tantos trabajos en nuestras huertas y macetohuertos?, después de ver estos dos ejemplos me da que pensar.
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